De haber existido antes, es más que probable que los pincernas medievales hubieran servido a sus reyes este prieto picudo envejecido en barrica de roble.

Hoy te lo servimos a ti, que te quedas en casa. Disfruta con los tuyos del Pincerna Sumiller, un vino cuya calidad excepcional le ha otorgado varios premios de prestigio internacional.

Al igual que los pincelas seleccionaban para su rey los mejores vinos del Reino de León, hoy Bodegas Pincerna te lleva a casa sus mejores tintos, rosados y blancos.

Disfruta con los tuyos de nuestros vinos elaborados con excelencia a partir de las mejores variedades de prieto picudo y albarín.

PINCERNA, UN NOMBRE CON MUCHA HISTORIA.

Pincerna, el nombre de esta bodega, era el término utilizado en la Edad Media para nombrar a la persona que, en la corte real, tenía el cometido de servir a su señor los mejores vinos del Reino. El Pincerna solía ser una persona de absoluta confianza del rey, encargado también de vigilar el vino para que se mantuviera en las mejores condiciones e incluso de elaborarlo al gusto del monarca.

Hemos querido que este proyecto esté representado por la figura del Pincerna por sus conexiones directas a nuestras raíces y a las tierras y viñas donde se originan los vinos que elaboramos.

De hecho, antiguos legados recogen que las tierras de Villa Cesam, actual Villacezán, donde hoy se localizan una parte de los viñedos que abastecen la bodega, fueron cedidas en 1032 por el Rey Vermudo III a su Pincerna Fáfila Pétriz, en agradecimiento a su fidelidad.

Por nuestra misión de elaborar grandes vinos y servirlos adecuadamente, no se nos ocurre un nombre mejor para nuestro proyecto que el del antecesor de los actuales sumilleres, Pincerna, un término que rinde homenaje a la historia vitícola de nuestra región y nos inspira a dotar de la máxima calidad los tintos, rosados y blancos que hacemos llegar a las copas de nuestros clientes y amigos.

VINOS CON CONTENIDO, PARA SER COMPARTIDOS.

No hay nada más lleno de historias que una botella de buen vino. Cada botella de Pincerna encierra un contenido que habla de la tierra, de las raíces, del paso del tiempo, de la pasión conjunta por trabajar la tierra, de las noches de vendimia, del reposo y la calma… Pero una vez que se abre, un Pincerna se enriquece con otras historias, las que se comparten en torno a las copas de quienes lo disfrutan.

Los vinos Pincerna se elaboran para ser disfrutados con amigos, con familia o con los que, a nuestro alrededor, saben apreciar las cualidades del buen beber y el buen comer.

Compartir un rosado o un tinto joven Pincerna es descubrir lo mejor de una uva singular como la prieto picudo y disfrutar de su frescura y aromas en buena compañía.

Abrir un blanco Albarín es apreciar la escasez de una variedad tan única que solo se encuentra en contados pagos de León; y servirlo en las copas es despertar de inmediato los sentidos de quien sostiene en la mano una fruta que huele a flores.

Descorchar un Pincerna Sumiller es adivinar los secretos que encierran las viñas centenarias que, junto a otras cepas más jóvenes, dan origen a este vino y a otros que están por venir.

Queremos que nuestros vinos transmitan nuestra pasión y puedan ser disfrutados por todos aquellos capaces de valorar las cualidades de los buenos vinos y los grandes momentos compartidos en torno a su copa. Cada vino es único, como únicas son las historias que encierran y relatan estos vinos con contenido. Déjalos que te cuenten…

BODEGAS PINCERNA

Pincerna elabora vinos que son el resultado de un trabajo meticuloso en nuestros viñedos y el buen hacer en bodega.

La bodega está liderada por un equipo experto que centra su esfuerzo en la recuperación de viñas viejas y en la innovación aplicada a la elaboración de los vinos.